Mi pervertido tío

Hola a todos. Díganme Sofía. Esto es cuando tuve 14 años. Mi padre era un alcohólico que por el vicio nos dejaba sin que comer con mi madre y mis dos hermanos. Mamá tenía que pedir fiado y tenía que lavar y planchar ropa ajena, pero eso apenas le alcanzaba para pagar el alquiler y nuestra comida.

Mi mamá tiene un primo de unos 35 años, divorciado, que tiene dinero, pues ella le pedía prestado, pero hubo un momento que no quería darle porque le debía ya mucho. Mi tío me decía a mí que le dijera a mi madre que cuando le iba a pagar, pero yo no le decía nada a mi madre, mucho tenía ella con aguantarle a mis padres sus borracheras.

Cierta vez me mandó de nuevo a pedirle dinero prestado a mi tío, yo sabía que aún ella le debía mucho y que no le daría, pero me fui a la casa de mi tío.

Mi tío primero me negó el dinero, pero yo me senté en el sofá a suplicarle que nos diera ese dinero prestado, él se sentó a mi lado y me dijo que ya estaba grande y que me estaba volviendo una linda mujercita. Luego me tocó las piernas y me dijo que me daría el dinero si lo besaba. Dudé un momento, pero pensé en mis hermanos y le dije que estaba bien, solo un beso.

Mi tío me empezó a besar los labios, yo lo rechazaba al inicio, pero el con un poco de fuerza me obligaba a besarlo, luego su lengua intentaba meterse en mi boca, yo lo había hecho solo con uno de mis novios, así que sabía como hacerlo, nos besamos y sus manos recorrían mis piernas y eso me estaba calentando. El beso duró varios minutos, ya me estaba gustado, debo decir que mi tio no es feo, de hecho, le conocí varias novias. Sus manos tocaban mis muslos y eso me agradaba.

Al rato lo empujé y le dije -ya basta!!, me darás en dinero si o no?-

Mi tío se paró y fue traer dinero y me lo dio, salí de su casa, las piernas me temblaban. Al llegar a la casa y después de darle el dinero a mamá, fui al tocador, mi braguita estaba mojadita…

A la semana, lo mismo, mi madre me envió de nuevo. Mi tío se sonrió al verme.

Nuevamente, se negó a dármelo, le ofrecí que podía besarme de nuevo, pero el me dijo que eso ya no era suficiente, ya que era mucho dinero lo que debía mi mamá.

-Para dártelo debes hacer algo por mí!- me dijo

-Qué quieres tío?- respondí

-Quiero verte sin ropa, quiero verte desnuda!-

-Eso no!! Como eres tío..no me pidas eso- le dije casi en súplica.

-Entonces no hay dinero… vete!!-

Me di la vuelta, pero antes de llegar a la puerta, pensé que sería de mi familia esa semana. Asi que regresé y frente a él me fui desabotonando mi camisa del colegio, luego la falda, los zapatos, calcetas y me quedé en ropa interior. Mi tío estaba frente a mí, esperando.

Primero me quité el sostén, dejé libre mis senos, que estaban creciendo y eran muy bonitos. Luego me quité mi braguita, me tapé mi caquita, pero el pidió vérmela, quité mis manos y le mostré mi cuquita peludita, pero rasuradita, es decir que me gustaba darle forma a mi vello púbico.

Mi tío casi se saboreaba frente a mí. Me pidió darme la vuelta y agacharme para verme mis nalguitas y mi cuquita por atrás.

-bueno ya!!- le dije y tome mi ropita y me la puse. Me dió el dinero y me fui corriendo a mi casa.

Eliminaré lo sucedido entre semanas, para no hacerlo largo. La siguiente vez, me pidió lo mismo, me quité la ropita y me dijo que me pusiera en cuatro, lo hice, luego sentí las manos de mi tio recorriendo mis nalgas, la espalda y mis senos, yo le pedía que no lo hiciera, pero la verdad me gustaba como sus habiles manos me manoseaban el cuerpo, me estaba mojando en serio. Luego se puso atras de mi y sentí sus labios y lengua besándome y chupandome las nalgas, sentí como se electrizaba mi cuerpo, me abrió las nalgas y lo sentí lamiendo mi ano y luego bajó a hacer lo mismo con mi rajita, quise quitarme, pero me tomó de las nalgas y de las caderas y siguió comiendo mis hoyitos, su lengua hacia circulos en mi ano y jugaba con mi clitoris. Sentí que me desfallecía, grité y chillé, me estaba sobre viniendo un orgasmo. Mi tio se comio mis juguitos y me dejó alli en el suelo mientras el se sentaba en el sofá con la boca llena de mis fluidos. Me paré, me puse la ropita y salí de nuevo corriendo. Esa noche no podía dormir, en mi mente se repetía lo que había sentido al tener mi corrida.

Siguiente vez. Yo tenía mucha verguenza de ir a la casa de mi tio. Le supliqué a mi madre que fuera ella, pero muy enojada casi me empujó para que fuera. Llegué y la cara de mi tio se encendió cuando me vio en la puerta.

-Ya sabes lo que debes hacer- me dijo.

Me fui quitando la ropita y quedé de nuevo desnuda. Crei que me pediria de nuevo ponerme en cuatro en el suelo, pero no fue asi. En cambio el me dijo que me pusiera hincada frente a él. El se fue abriendo el pantalón y sacó su verga. Nunca había visto una, solo se la toqué a mi novio una vez. Era dura y parada, y mi tio se la sobaba con frecuencia, tenía largas venas que sobresalian, y terminaba en una cabeza grande y gorda. Me dijo que cerrara los ojos y abriera la boca, lo hice después de que me amenazó.

Abri la boca y el fue poniendo su verga entre mis labios, pidió que la chupara, lo fui haciendo despacio, lo oi gemir de gusto. Luego me dijo que lo chupara de mejor forma, que podía hacerlo mejor. La fui chupando como si fuera una paleta de helado, él me decía, asi.. asi..aassii!!. Luego de varios minutos chupando su verga, yo oía a mi tio más emocionado, me tomó de la cabeza y ahora el fue moviendo su verga con fuerza dentro y fuera de mi boca. Yo oía los quejidos de mi tio. Luego me dijo que ya mero, ya mero.. no sabía que queria decir. Cuando de pronto siento algo caliente en la boca, al probarlo se siente salado, quiero escupirlo, pero mi tio me sostiene de la cabeza y no deja sacar su verga, no tengo más que tragar su semen, el aun entra y sale de mi boca y cada vez siento un poco más de semen y lo engullo.

Los dos encuentros anteriores se repiten, es decir, el haciendome sexo oral (después supe que asi es su nombre correcto) y yo luego haciendole sexo oral. En una oportunidad tuve dos orgasmos casi consecutivos con él comiendome mi rajita. Debo confesar que ya me había adaptado a eso y de alguna forma me gustaba lo que hacíamos.

Cuando cumplí los quince (siete meses después de haber empezado los encuentros sexuales con mi tio), no hubo fiesta, no hubo muchas cosas. Mi tio le dijo a mi madre que me dijera que me daria un regalo. Yo fui y mi tio me tenía varios regalos, un vestido lindisimo, ropa interior sexy, zapatos de señorita, luego nos sentamos en un sofá y yo quería besarlo y nos fundimos en un gran beso, me fue quitando la ropa y desnuda me llevó cargada a su cama (era la primera vez que me ponia en su cama), me besó todo el cuerpo, por primera vez me chupó los senos, eso me puso a mil, me puso muy caliente, me fui a mamarle la verga, pero esta vez el no quizo terminar en mi boca, me dijo que esta vez me iba a hacer mujer, me abrió las piernas y luego de chuparme mi rajita, se puso encima de mi y me fue penetrando mi rajita, sentí un gran dolor cuando su pene entró en mi vagina, pero el dolor cedió y me fui excitando mucho mucho. El comenzó a entrar y salir de mi rajita, yo lo abrazaba y me quejaba de placer. Me hizo llegar a un orgasmo que nunca había sentido, luego me vino otro, yo estaba que me moría de placer.

Luego aún no satisfecho de haberme desflorado. Me puso en cuatro y me penetró la vagina de nuevo, en esa posición sentí su verga más grande y gorda, me cogió de lo lindo hasta hacerme llegar de nuevo. Sentí por último su semen caliente inundarme la rajita, y ese fue mi regalo más grande de mis quince años. Debo decir que de milagro no quedé encinta, ya que no usó nada de protección.

Mi tio me siguió cogiendo por dos años, ya no era por el dinero a mamá, sino que nos veiamos en otros lugares, me llevó a varios moteles, me cogió en su auto, y en todas las partes de su casa. Ahh y mi ano no se salvó, mi tio me desvirgó mi orificio anal, se volvía loquito cuando lo hacíamos por allí.

Tiempo después me fui a vivira otra ciudad con la hermana de mi madre, por lo problemas con mi papá. Yo lloré cuando eso sucedió, no me había dado cuenta que estaba enamorada de mi tio y que añoraba sus caricias y su pene dentro de mi.

Tiempo después, olvidé a mi tio con un nuevo amor, un novio que me quería mucho y que támbien yo amé. Luego tuve otro y otro novio, por fin este último se casó conmigo y ahora tenemos un bebe que es nuestra alegría. Aveces pienso en mi tio, que se dio gusto conmigo, en mi mejor edad tierna. Y dégusto acordándome de nuestros encuentros, todos fueron muy buenos y quisiera tener la pelicula de cada uno, pero ni modo…

Anónimo